Un año más nos reunimos de una manera conjunta, cursos, profesores, Madres y familias para celebrar un día tan importante y necesario a la vez. A las once menos diez comenzamos a degustar unos deliciosos y solidarios panes impregnados en un aceite de la casa, sí así es, un aceite elaborado por el curso de D. César, sexto de primaria, llamado “Oleum Montis” hecho como producto final de un proyecto relacionado con los olivos de la provincia de Jaén (Torredonjimeno), tierra del oro líquido…
Sobre las once todos nos reunimos en el patio para hacer una convivencia solidaria, con nuestros panes y sobre todo con las ganas de involucrarnos en un desayuno empapado de ayuda, solidaridad y apoyando una causa digna de moralidad y honor. Alumnos de todas las etapas junto con familiares, docentes y personal del centro disfrutamos de una hora de recreo merecido, y que a su vez se convertía en una reunión plena de satisfacción, risas y momentos de paz.
Hemos de educar para y en convivencia, y siempre colaborar con nuestro granito de arena. Aunque no podamos hacer grandes cosas, pero sí hechos pequeños con un gran amor.
Hoy ha sido un día merecedor de celebración, cubierto del mejor olor: el pan; el mejor sabor: el aceite trabajado de los alumnos de sexto y su tutor; y el mejor amor: el de los niños y niñas que sonreían incondicionalmente por una buena causa.
Seamos solidarios, ayudemos, colaboremos y hagamos piña en todo lo bueno. Aportar nuestro granito de arena no será en vano porque los pequeños detalles son los responsables de los grandes cambios. Y lo más importante no es lo que ofrecemos, sino el AMOR que ponemos al dar.
Seamos caritativos y no nos volvamos impasibles ante el dolor.
Elena Liñán Serrano
