Acompañados de su séquito de pajes, los Reyes Magos de Oriente han visitado nuestro Colegio. Vinieron cargados de caramelos, villancicos, risas y abrazos, y fueron recibidos con gran expectación y, sobre todo, sorpresa, ya que los pequeños desconocían la visita tan especial que iban a recibir.
Algunos de ellos rompieron a llorar, otros a reir, pero todos ellos con una gran ilusión. Hasta a los mayores se les dibujó una gran sonrisa en la cara, reviviendo aquel día en el que hacían correr a sus padres para no llegar tarde a la cabalgata de nuestras majestades. Sí, a pesar de los años aún sentimos ese extraño cosquilleo en la barriga cuando llega el día en el que aquellos deseos escritos en carta se hacen realidad.