El día nos acompañó desde el punto de vista meteorológico, se marcharon las lluvias y el frío y por el contrario, tuvimos un sol radiante y cálido, el cual nos acompañó en esta grata convivencia escolar.
Salimos sobre las ocho y media de la mañana y nos dirigimos dos autobuses al pueblo de Cazorla. Una vez allí desayunamos en una bonita y céntrica plaza. A continuación, nos dirigimos a ver la iglesia de Santa María y el museo de Félix Rodríguez de la Fuente. También nos hablaron del funcionamiento del molino hidraúlico harinero y nos explicaron que el parque de Cazorla es el más grande de España y el segundo de Europa. Después fuimos a visitar la bóveda del río Cerezuelo, que se encontraba por debajo de la iglesia, y teníamos que pasar por un camino muy comprometido y a la vez apasionante. Todo ello lo hicimos en diferentes grupos, ya que éramos muy numerosos.
Antes de irnos a comer y para abrirnos el apetito, subimos unas pronunciadas cuestas que terminarían en el Castillo de la Yedra. Hicimos todos una visita rápida e intensa y sobre las dos nos dirigimos de nuevo a los autobuses, los cuales nos llevarían al inicio de la Cerrada del Utrero en la sierra para comer y relajarnos durante un corto tiempo, ya que nos habían preparado una ruta, “la ruta de la Cerrada del Utrero”, la cual se encontraba en plena sierra de Cazorla y a la vera del río Guadalquivir. Anduvimos durante un buen rato, no calculo cuánto… Porque perdías la noción del tiempo por las impresionantes vistas de esta.
El recorrido fue un poco sinuoso, teníamos que ir en fila con mucho cuidado, pero sí merecía la pena sentir el sonido de fondo de la naturaleza y sobre todo divisar esas maravillosas vistas llenas de encanto.
Volvíamos a Torredonjimeno sobre las ocho de la tarde con la gratitud de haber vivido un intenso día pleno de bonitos recuerdos.
Elena Liñán Serrano
